El Gobierno acaba de modificar ciertas condiciones financieras del programa Ahora 12 en respuesta a pedidos de bancos y empresas que participan del sistema de venta oficial.
Mediante la Resolución 404/2022 de la Secretaría de Comercio Interior y a pedido de cámaras y asociaciones bancarias, se actualizaron las tasas de descuento previstas del programa “en miras a mantener su sostenibilidad”
La norma, sancionada por el organismo que dirige Roberto Feletti y que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo, sustituye varios incisos del llamado Reglamento Unificado del Programa de Fomento al Consumo y a la Producción de Bienes y Servicios “AHORA 12”.
En este sentido, le explica a proveedores y comercios que en las operaciones realizadas a través de tarjetas de crédito cobrarán en un plazo de hasta 10 días hábiles, para las ventas realizadas con la modalidad tres cuotas para varias de las categorías del sistema. En este caso, se aplicará una tasa máxima de descuento del 4,06%
En el caso de los pagos en seis cuotas también regirá el mismo plazo de cobro de 10 días pero con la aplicación de una tasa máxima de descuento del 7,81%.
Los detalles de la resolución
Además, los proveedores y comercios podrán elegir cobrar en un plazo de 60 días corridos con una tasa máxima de descuento del 11,33% directa o en un plazo de hasta 10 días hábiles con una tasa máxima de descuento del 14,73% directa, para las ventas realizadas con la modalidad 12 cuotas. Otra opción es cobrar en un plazo de 60 días corridos con una tasa máxima de descuento del 19,99% directa o en un plazo de hasta 10 días hábiles con una tasa máxima de descuento del 23,56% directa, para las ventas realizadas en 18 cuotas.
La tercera variante es cobrar en un plazo de 60 días corridos con una tasa máxima de descuento del 26,36% directa o en un plazo de hasta 10 días hábiles con una tasa máxima de descuento del 29,68% directa, para las ventas en hasta 24 cuotas.
Según la resolución, el plan Ahora 12 tiene como objetivo “estimular la demanda de bienes y de servicios, mediante el otorgamiento de facilidades de financiamiento a plazo, dirigidas a los usuarios y consumidores, para la adquisición de bienes y servicios de diversos sectores de la economía”.
Asegura también que tanto bancos como comercios adheridos “han incrementado sostenidamente su oferta local, logrando abastecer la demanda interna y sostener los niveles de demanda de las y los consumidores”.